Si pudiese publicar todo lo que siento, todo lo que pienso... Pero realmente pienso que muchas cosas son sólo para una persona, palabras que sólo ella puede entender. Y sí, quedaría muy
bonito dedicarlo en un
post, pero me parece un movimiento demasiado vanidoso, un: "
mira todo lo que te quiero que se lo digo a todo el mundo", un: "
estoy buscando vuestra aprobación o alardeo de lo mucho que quiero a esa persona".
Pero, en realidad, ¿de qué sirve
publicar a los 4 gigas lo mucho que queremos a esa persona? ¿De qué nos sirve demostrar a ese
gente que en realidad
no conocemos ni nos conoce lo mucho que amamos a una persona? ¿Buscamos
aprobación? ¿Alardeamos? ¿O simplemente es que nuestra vida
2.0 está absorviendo inexorablemente
la real [o 1.0, como hemos pasado a denominarla]?
¿Tan frívolos nos hemos vuelto que apreciamos más
140 caracteres a una frase al oído? ¿Tan mecanizados estamos que preferimos un
estado a un abrazo, un beso o una caricia?
No sé si definirnos como unos
vagos que no se molestan en moverse por un gesto tan simple como una caricia de corazón hacia la persona amada y preferimos acariciar las teclas del ordenador o el tan apreciado smartphone; o como unos "
tecnoególatras" que esperan palmaditas en la espalda por decir palabras bonitas de esas personas a las que realmente les importa un bledo nuestros amoríos, corazones rotos, con quien follamos o con quién dejamos de hacerlo.
Personalmente, se me demuestra más con una
caricia que con mil estados, con un mensaje directo a mí que con cientos de twets. El
calor de un abrazo no lo reemplaza los comentarios de "tqm" en mis tablones.
Soy yo la que necesita sentirse querida, no que mis contactos se enteren.
Más amor y menos revolución tecnológica.